Rafael Gómez Sánchez alias Sandokan
Caso malaya,
condenado por corrupción e imputado por cohecho.
Fundó un partido político, Unión Cordobesa, con el que se presentó a la alcaldía de esa
ciudad en el 2011 obteniendo 24.805 votos y 5 concejales haciéndose con un 15,23%
de los sufragios.
Debe a
Hacienda cerca de 87 millones de euros, por supuesto no ha devuelto una perra.
Ha llegado
a mis oídos las correrías de este tiparraco y seguramente al de ustedes.
Normalmente no me detendría en esto, pero si lo hago es para recalcar una vez mas hasta qué
punto este triste país ha perdido el norte, no
merece la pena luchar nada, ni tenemos remedio alguno.
Es normal
ya que en este país se presenten a las elecciones delincuentes de este calibre y salgan impunes de cualquier condena, esto ya no es ni noticia, es del todo corriente, lo vemos todos los días.
Lo realmente triste ya es que la gente les vote, porque con el voto llega la legitimación. Que mayor legitimación que lo refrendado por las urnas. Yo robo
pero como a mí me votan, pues sigo robando. Estoy legitimado.
Con esto se deduce que la mierda endémica que nos afecta no es solo culpa de quién roba y saquea sino también del subnormal que les vota. Solo en España se vota a un
ladrón, en ningún país del mundo verán
lo que pasa aquí, pero en ninguno solo,
solo aquí. Un condenado por corrupción puede hasta ganar unas elecciones. Viendo esto yo cada vez echo menos la culpa al sistema, sin duda habría que revisar urgentemente el cerebro de muchos votantes. Porque un tipejo como este haya llegado donde está dice mucho de quienes lo han puesto ahí. Con este caso y otros tantos otros como este queda constatado hasta que punto merecemos todo lo peor que nos venga por permitirlo. Es bochornoso que miles de jóvenes altamente cualificados y muy preparados tengan que emigrar de su país si quieren ganarse el pan mientras esta gentuza sin cultura alguna sigue robando a espuertas y haciendo lo que le da la gana.
Así es. Gracias por tu comentario. Un saludo
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