viernes, 11 de marzo de 2011

SOBRE LA VIOLENCIA DE GÉNERO

Estamos hartos de verlo y oirlo a todas horas. Cada dos por tres hay una nueva mujer victima de la violencia de género. Y hasta seguro que conocemos o hemos conocido algún caso que nos ha tocado de cerca. Ya ni siquiera nos sorprende como pasa a engrosar la lista de victimas una nueva fémina a manos de un hombre por definirle de alguna manera. Porque quién agrede a una mujer no solo física sino verbalmente o en cualquier forma o manera es un cobarde, un ser despreciable, lo mas bajo ruín y rastrero equiparable al comportamiento de cualquier vil asesino o pederasta sin escrúpulos.
Viendo y oyendo lo que dice este podrido gobierno sobre el tema cada vez que aparece una nueva victima no puede esperarse que esta violencia brutal e injustificada vaya a reducirse a medio y largo plazo . Añade que la crisis económica no tiene nada que ver en este aumento y que sigue trabajando para prevenir esto. Si,  ya se ven los frutos de su trabajo.
El año pasado se tiñió de negro. Es el luto de las 85 mujeres asesinadas por sus parejas o ex-parejas a lo largo de 2010. Sólo en diciembre, murió una mujer cada tres días. En 2009 murieron 68, en 2008, 84 y en 2007, 71 mujeres. Como vemos es un problema que va creciendo cada año. Este año sin ir mas lejos hasta el momento son 17 las victimas.
Varón entre 31 y 45 años sin alteraciones mentales. Según un informe del grupo de expertos en violencia de género del CGPJ, este sería el perfil clásico del agresor. Me sorprende que en la mayoría de los casos no actúan a consecuencia de una enfermedad o alteración mental o bajo los efectos del alcohol o las drogas. O sea que actuan sabiendo bién lo que hacen. La mayoría de las muertes se producen por arma blanca o traumatismos de todo tipo. Muchas de las mujeres ni siquiera llegan a denunciar a su agresor, no hay orden de alejamiento o si la hay, esta se incumple sin que la policia pueda hacer nunca nada para evitarlo. Es evidente que las mujeres no confían ni en las fuerzas de seguridad ni en la justicia. Por eso no denuncian. ¿Para que? se preguntan muchas. Y así va el asunto.

Lejos de estos datos me gustaría encontrar a alguién que me dijera el porqué o las razones de este aumento repentino y drástico. ¿No somos cada vez mas civilizados y educados se supone? Como sabemos esto siempre ha sucedido, pero que se diera en el pasado se entendia,  pero naturalmente hoy día se supone que hemos recibido una educación y una formación adecuados tanto hombres como mujeres entre otras cosas para dar y recibir respeto y tener unos valores y normas de convivencia. Lo que no comprendo es este tipo de violencia sin sentido. "Tu eres mia", "sino estas conmigo no estarás con nadie" "eres una inútil" etc etc deberían hacernos reflexionar sobre el perfil psicológico que abunda entre muchos hombres con quienes convivimos. Los tenemos a nuestro alrededor. ¿Por que no denunciamos? ¿Tan cobardes somos? Yo detesto a muerte a toda esta gentuza.
 El secreto para prevenir este tipo de violencia siempre a estado y estará en el respeto mutuo y la educación que damos a nuestros hijos y que no nos tiemble la mano en denunciar y señalar a estos maltratadores. En nuestras manos está que nuestro chaval no sea en un futuro posible maltratador o quizás maltradado/a. Porque en un matrimonio o pareja donde un hombre ejerce violencia sobre la mujer, los hijos de ese matrimonio también serán victimas. Unas victimas muchas veces olvidadas nacidas bajo el síndrome del miedo y el rencor.

1 comentario:

  1. Como bien dices, este tipo de violencia no sólo consiste en la muerte de la mujer. El insulto, el menosprecio, la violencia diaria ocurre cada día en muchos hogares. El asesinato de la mujer es el lado más espectacular, por llamarlo de alguna forma, pero la muerte en vida de muchas mujeres se produce todos los días.
    Considero que lo mejor de tu artículo es la incitación a la denuncia de estos casos cuando ocurren a nuestro alrededor. En el fondo, este problema es un problema de todos y todos debemos contribuir,como bien dices, a acabar con él.
    Buen artículo.
    Un saludo.

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